REDACCIÓN AZAGALA
Hoy, 10 de enero, hace justo 15 años de la gran nevada que cayó en Alburquerque y en buena parte de Extremadura. Comenzó a caer tímidamente aquel domingo a las 12 de la mañana, alternándose lluvia fina y aguanieve, pero tras un paréntesis de una media hora, comenzó a arreciar cada vez con más fuerza. A las 5 de la tarde la nieve alcanzaba los 8 centímetros de espesor en algunas calles y superaba los 10 en otras zonas del pueblo.

En el centro apenas se veía a un puñado de viandantes, casi todos con cámaras fotográficas para inmortalizar ese día histórico. Numerosos alburquerqueños optaron por montar en sus vehículos y recorrer las calles para contemplar el insólito aspecto de las mismas.
En Las Laderas se veía la estampa típica de unos niños arrojando bolas de nieve a sus amigos y algunas personas osadas subieron por la pendiente de la ladera sur del castillo y encendieron una hoguera, momento que inmortalizó la cámara de AZAGALA, que publicó en su número 21 un gran reportaje de la nevada.

Algunos coches quedaron atrapados en algunas partes del pueblo, como en la Fuente del Caño y en algunas fincas cercanas a Alburquerque.
A las 6 de la tarde la nevada cesó, pero no sus consecuencias. El puerto de Los Conejeros permanecía cerrado y solo podía atravesarse con cadenas, por lo que las personas que en la tarde de ese domingo tenían que desplazarse a Badajoz tuvieron que irse por Villar del Rey.

En la mañana del día 11 aún quedaba bastante nieve en las calles y operarios municipales tuvieron que amontonarla para facilitar la salida a la calle de los alburquerqueños.
FOTOS: Francis Negrete/ ARCHIVO AZAGALA. (Todos los derechos reservados)
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