Esta mañana nos enterábamos de una noticia triste: el fallecimiento de una persona muy conocida y apreciada en Alburquerque, Francisco Borrego Domínguez, conocido siempre como Piqui. Fue jugador del Club Polideportivo Alburquerque y uno de los grandes aficionados. Con su padre, el “señó Juan el de la Estellesa”, iba a todos los partidos fuera de casa y en los disputados en nuestro campo fue siempre uno de los animadores de la grada.
Sus últimos años los ha pasado en la residencia de San Vicente de Alcántara, donde recibía a todas las personas de Alburquerque y donde era igualmente apreciado.
Fue una de las primeras personas con discapacidad que practicó deporte y trabajó en el ayuntamiento durante muchos años.
En el próximo número de la edición impresa de AZAGALA le dedicaremos el homenaje que merece y desde estas líneas trasmitimos nuestro más sentido pesar a su familia.
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FOTOGRAFÍA: Piqui, con otro gran alburquerqueño que nos dejó, Clemente Pocostales, cedida por éste último.
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