REDACCIÓN AZAGALA
Se notó anoche que la situación del castillo preocupa de verdad. En un pueblo que ha demostrado durante 25 años una sumisión al poder, ayer comenzó a reflejarse que, por fin, la ciudadanía empieza a despertar y a luchar por causas justas independientemente del color político del gobierno a quien se le reclama esa justicia. Ayer la queja de más de 350 personas era contra el maltrato sufrido por el más importante de los castillos cristianos existentes en Extremadura, como bien dijo Aureliano Sáinz, presidente de honor del Colectivo Cultural Tres Castillos, organizador del acontecimiento.
Es evidente que la llamada de socorro de la fortaleza, plasmada en el lema de la campaña “SOS, Castillo de Luna”, debería haber reunido en la Alameda a miles de personas, pero el número de asistentes desbordó las previsiones de la organización que esperaba alrededor de cien, visto lo visto con las concentraciones que se llevaron a cabo en Alburquerque en los últimos años. Y no solo es nuestra villa, el extremeño en general es conformista y poco exigente, de ahí que llevemos tantos años estando como estamos…
Entre los presentes anoche estaban la mayoría de concejales del gobierno local, con el alcalde, Manuel Gutiérrez y el concejal de Turismo, Jesús Martín, a la cabeza, así como el edil y presidente local del PP, Luis Paniagua, quien volvió a demostrar que para él el pueblo está por encima de las siglas. Paniagua ha mostrado coherencia en ese asunto y ha exigido de manera privada y públicamente a su partido que actúe de una vez y restaure el castillo. Estaba Eduardo Maya, quien mejor conoce la situación de la fortaleza y quien más lo sufre porque está día tras día recibiendo turistas en el castillo, la mayoría de los cuales no entienden cómo se encuentra en esa situación de ruina, con algunas zonas que ni siquiera pueden ya visitarse. También asistió el responsable del Patronato Municipal de Deportes, Agustín Rubio; el ex presidente de Tres Castillos, Eugenio López, la persona que más ha investigado el patrimonio y la cultura de Alburquerque; y otro antiguo presidente del Colectivo, Antonio Luis del Pozo; miembros del grupo de Combatientes, como Moisés Cayetano y Antonio Maqueda, que se desplazaron desde Badajoz, Leocadio José Blanco, Javi Carvajal, Emilio Martín (ex alcalde de Alburquerque), Pablo Bozas (quien puso el equipo de sonido) y Eugenio González, así como Esteban Santos y Juan Ramón Duque, ambos miembros del consejo de redacción de AZAGALA. Vimos asimismo a Pablo Márquez, que ha apoyado muy activamente la campaña en redes sociales y en general a personas de algunas asociaciones locales, y empresarios comprometidos con el progreso de nuestra villa como Francisco José Vadillo.

También asistieron miembros de ADEPA, asociación a la que Alburquerque estará eternamente agradecido, porque gracias a su lucha, el castillo se salvó de la mayor salvajada y atentado que quisieron cometer contra su integridad. Carlos Alberto del Pozo, que intervino para exigir la inmediata intervención por parte de la Junta de Extremadura, titular de la fortaleza, y Luis Gil, fueron los representantes presentes de Adepa.
Pero el primero en intervenir fue Leal, un hombre comprometido en todos los sentidos con Alburquerque, quien aseguró que el pueblo “está consintiendo el ninguneo de unos y otros gobiernos a la seña de identidad de Alburquerque, un castillo del que nos gusta publicar muchas fotografías, como si eso bastara para demostrar nuestro respeto al monumento”. Añadió que “si el castillo pudiera decir lo que siente, nos culparía de que no le estemos defendiendo como merece, pero sus lamentos los muestra con las heridas graves que sufre…”.

Posteriormente, como decimos, tomó la palabra Carlos Alberto del Pozo, cuyas palabras escucharemos próximamente en su integridad, así como la de Aureliano Sáinz, que hizo un repaso por la historia del castillo y anunció que esa exitosa concentración debería ser solo el principio de una campaña para exigir una intervención integral en la fortaleza y en los baluartes, para ponerlos en valor en beneficio del pueblo. También escucharemos el discurso completo de Aureliano, que se desplazó desde Córdoba, como Leal lo hizo desde Barcelona, o José Ángel Santos desde Madrid, todos ellos demostrando su compromiso con Alburquerque y su patrimonio.
Las camisetas con el emblema de la campaña “SOS salvemos el castillo” se terminaron, pero quien lo desee puede encargar más a Esteban Santos.

Paralelamente a estas intervenciones colocaban unas mesas que se desbordaron para recoger firmas en las que se pedía a la Junta de Extremadura que reciba al alcalde de Alburquerque, con el fin de tratar de éste y otros asuntos que afectan al pueblo. Se recogieron casi 300 y se acabaron las cuartillas, por lo que esta campaña de firmas seguirá en establecimientos del pueblo.
Se cerró el acto con un audio de un bello poema, muy bien recitado por su autor Juan Calderón, a propósito del estado del castillo. Y finalmente, parte de los presentes posaron para una fotografía junto al caballero medieval, la obra de Pablo Lapeña.

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PORTADA: Parte de los asistentes posaron para las fotos al final del acto.
VIDEO: Intervención de Leal.
FOTO 1: Imagen parcial de la Alameda. / MARI CARMEN MARTÍN
FOTO 2: Intervención de Carlos Alberto.
FOTO 3: Intervención de Aureliano.
FOTO 4: Colas en una de las mesas de recogida de firmas.
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