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Buscando ideas para rentabilizar el castillo

Con la presencia de varias asociaciones y agente sociales se presentó en el CID de la Diputación la iniciativa Innocastle que ha elegido Alburquerque para ejecutar un proyecto piloto con el fin de establecer un protocolo que sirva para la financiación con Fondos Estructurales dirigidos al patrimonio y con vistas a garantizar su sostenibilidad a largo plazo. Es decir, se trata de diseñar y evaluar la manera de realizar un análisis socioeconómico de coste-beneficio para inversiones importantes en promoción, restauración o explotación del patrimonio cuando se utilizan fondos FEDER en Extremadura.

En este proyecto piloto no hay fondos económicos para actuaciones en Alburquerque, sino que se trata de aportar ideas que incluyan actividades y acontecimientos que se desarrollarían en el castillo lo largo de un año, a modo piloto, priorizando aquellas actividades con potencial de recorrido y el mayor impacto socio-económico para la población y que sean respetuosas desde el punto de vista del patrimonio. Se trataría de una propuesta de agenda que sirva como recomendación u orientación para las instituciones públicas teniendo responsabilidad en la gestión del castillo.

Innocastle pretende velar por la protección de los castillos y villas históricas en las cuatro regiones participantes en este plan europeo a través del desarrollo y puesta en marcha de un plan de acción orientado hacia los castillos históricos, villas históricas y casas solariegas. En nuestro caso el objetivo es encontrar soluciones para una conservación y explotación sostenible del castillo.

Sus socios son el Instituto Nacional de Patrimonio de Rumanía, la Universidad de Gante, Bélgica, la Diputación de Badajoz, España, el National Trust, Reino Unido (Fundación Nacional de Lugares de Interés Histórico y Belleza Natural y la provincia de Gelderland, Holanda.

En la reunión celebrada en Alburquerque, Patricia Mora, miembro de la empresa encargada de ejecutar el programa piloto de la Diputación de Badajoz, señaló que se eligió el castillo de Alburquerque desde el principio como lugar idóneo y lamentó la situación en que encuentra, dejando claro que el Innocastle no tiene fondos para restáuralo, pero sí se puede incluir en la agenda para actuaciones futuras. “Si no se hace algo, el patrimonio degenera y se pierde”, señaló, y en eso incidieron prácticamente todas las asociaciones existentes, excepto una. Todos hablaron del pésimo estado en que se encuentra el castillo y que no puede llevarse a cabo una explotación sostenible y rentable sin una restauración previa. Eduardo Maya, técnico de Turismo y persona que mejor conoce la situación de la fortaleza, especificó las necesidades más urgentes de rehabilitación como la cubierta de la Torre del Homenaje que “se cala como un cesto roto y se va a caer”, explicó.

Asistieron Innoma, una asociación con una iniciativa muy interesante: integrar ocio y patrimonio; ACEA (Asociación de Empresarios y Autónomos), cuyos representantes se quejaron de que “no se aprovecha el castillo”; la Banda de Música; propietarios de un proyecto de turismo rural; el CALA (Colectivo Alternativo de Aprendizaje), contrario a hacer un “parador” en el castillo; Sambrona; la asociación de mujeres rurales El Álamo, la RCA, Adepa y el Colectivo Cultural Tres Castillos, editor de esta revista, aparte de un técnico de la Diputación.

El representante de Tres Castillos habló de la apuesta de esta asociación por la cultura y el patrimonio. Así, Francis Negrete aseguró que la cultura y la historia son imprescindibles para sensibilizar a la gente de cara a la conservación del patrimonio, y criticó el nulo compromiso del ayuntamiento con el castillo y con este proyecto, de hecho, señaló, seguramente no le han hecho ni caso a los promotores. Respondió Patricia Mora que, efectivamente, ni la Diputación ni su empresa habían sido capaces de hablar con nadie del consistorio para la ejecución del proyecto. La alcaldesa ni siquiera les ha recibido.

El turno más largo fue el de Adepa, quien explicó la barbaridad que quisieron cometer con el castillo y que lo salvó la oposición que hizo esta asociación, además, Cándido Mayo habló de proyectos que podrían desarrollarse en el castillo para darle vida y obtener un rendimiento económico al pueblo. También recordó que Adepa propuso hacer la hospedería en el convento y ya estaría funcionando, pero el ayuntamiento se negó.

Hubo turno de palabras para todos los colectivos y, al final, se quedó en puntualizar posibles usos del castillo para rentabilizarlo de manera sostenible, algo que se llevará a cabo en una próxima reunión.

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Portada: Reunión de ayer en el CID.

Foto 2: Imagen del plan.

Foto 3: Miembros de ADEPA presentes en el acto.