Los cuatro concejales de Ipal y el concejal del PSOE forzarán en un pleno el cese de Ángel Vadillo como asesor-portavoz y la retirada del sueldo a Marisa Murillo y la asignación económica a Laura Santalla. Además, exigirán que o bien tomen posesión o bien renuncien las personas que iban en la lista del PSOE encabezada por Murillo, todos ellos expulsados del partido.
Juan Carlos Prieto recordó que la Delegación del Gobierno pidió al ayuntamiento que llevara al pleno la prohibición de que Vadillo fuera director general, pero la alcaldesa no lo ha hecho, y ahora además de la obligatoriedad de convocar una sesión por el secretario cedido por la Diputación, si no lo hace la alcaldesa, con los cinco votos de la oposición se retirará todo cargo y sueldo al ex alcalde, siempre y cuando, claro está, no entren al menos tres concejales vadillistas nuevos en la corporación.
Prieto insistió en que se incumplirá la ley y habrá consecuencias penales para los ediles en el caso de que se nieguen a cumplir el requerimiento hecho por la Delegación del Gobierno.
El único edil socialista dijo que el ayuntamiento no atiende el pago a los trabajadores municipales, ni a las empresas, ni a la Seguridad Social, y encima no hacen nada por resolverlo y “gobiernan de espaldas a sus vecinos”.
Prieto argumentó que al quitar el sueldo a Vadillo, Murillo y la asignación a Santalla, algo se aliviarán las arcas municipales, porque se está gastando dinero, dijo, en mantener una “camarilla de gobierno que además no gobierna”.
Manuel Gutiérrez
El portavoz de Ipal vaticinó que la alcaldesa no convocará el pleno, luego lo tendrá que hacer el secretario y se celebraría más o menos el 20 de diciembre.
Hacemos esto, indicó, para “restaurar la democracia secuestrada por los gerifaltes” y vuelvan a celebrarse sesiones para aprobar cosas de urgencia, como resolver las dimisiones que se han presentado por parte de concejales del gobierno y no se han llevado a pleno y para que tomen posesión los que quieran hacerlo. Añadió que “hay que liquidar de una vez el hecho de que el gobierno esté en manos de quienes han arruinado la economía y la convivencia en Alburquerque y encima tengan asignado un sueldo pagado por los alburquerqueños que estamos apechugando con esta situación”.
“Esta rueda de prensa sirve para hacer pedagogía y demostrar que juntos podemos resolver la situación de Alburquerque”, explicó, y recordó que “Ipal es un grupo transversal” abierto a llegar a acuerdos con unos y con otros, dado que es la única arma para sacar al pueblo adelante.
Gutiérrez aseguró que el estado gravísimo de nuestra localidad “no tiene marcha atrás” y todos los vecinos tienen que entender que “este régimen se va a acabar muy pronto”. Pidió a los aún no convencidos que se unan también para sacar Alburquerque adelante. “Quienes traicionaron al pueblo y prometieron tantas cosas no pueden estar al frente del ayuntamiento y no están legitimados para seguir, entre otras cosas porque están en minoría”, añadió.
El portavoz de Ipal señaló que la mayoría del pueblo se pregunta por qué estos gobernantes no se van de una vez. “Esperemos que el fin sea lo menos traumático posible para todos”, dijo, y se mostró optimista al decir que “hay que devolver a la gente la ilusión y la esperanza por un Alburquerque nuevo”.