Esther, siento no haber podido hacer un comentario en el hilo a tu linda y a la vez triste carta de agradecimiento, y es por lo que ahora quiero hacer una pequeña reflexión “a mi manera”:
¿Y quién es Esther?: Sencillamente sencilla, mujer y trabajadora, esposa y madre, amiga de dar solución a los papeleos de los trabajadores del ayuntamiento, siempre con una amabilidad que la caracteriza. En mi corto recorrido en lo laboral siempre me facilitó la documentación. Gracias Esther.
¿Y quién es Esther?: Ahora se lo estarán preguntando muchos, pues lean lo anterior y lo van sabiendo, y quien será María, vaya otro nombre de mujer, yo se lo voy a decir querido lector, María puede ser su hija, sí, sí, como lo oye, María, o Luisa, o Carmen, pueden ser los nombres de las siguientes víctimas de estos irresponsables gobernantes que tenemos en el pueblo, pero claro como a mí no me ha tocado nadie de mi familia, pues a mirar para otro lado, igual cuando les toque ya no haya solución…
Estas dos señoras que quedan deben dimitir para que Alburquerque despierte del mal sueño, no esperen a que sea tarde.
¿Y quién es Esther?: Pues muy sencillo la última víctima castigada por los verdugos, esos que quedan hechos dueños del ayuntamiento, esos que ya mismo desaparecerán dejando reguero de personas perjudicadas por culpa de unas legislaturas llenas de malas gestiones y chanchulleos provocados por unos trileros.
Y para despedirme, Esther te pido licencia para hacerlo “a mi manera”… El día que DIMITAN lo festejaré, quizás con “Libertad sin ira”, de Jarcha, o quizás con el título de la película “Por quién doblan las campanas.
De momento me despido… No habrá paz para los malvados. SALUD Y SUERTE ESTHER.