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CARTAS EMPONZOÑADAS (V)

ANTONIO L. RUBIO BERNAL

 

Puerto de Albahacar, pleno invierno 2021

#Se vim à feira do cavalo en Golegã… z z z… é para comprar um lusitano… z z z… Eu  pergunto… z z z… quanto vale? Não… z z z… isso não está à venda… z z z… Eu tenho outros… z z z… Mas eles não são tão bons… z z z … Você deixa aqueles …

¡Uf, considerada Rosita! Por dónde andaba yo; a mi edad y soñando. ¡Ahí es na!; así desperté esta mañana, por eso te escribo, ¡divagando con hacer un trato na menos que en Golegã!; ¡si jamás he estao en esa feria!, ¿cómo es posible? ¡Y falando portugués! Te digo…

Acertaré si presumo que conocerás, y bien, lo ocurrío estos días en Puerto, ¿verdá?, con la huelga de hambre del policía, que vino al abandono el sexto día cuando recibió la “tela” adeudá. Yo subí el viernes, pa está con él, y salió a la plaza a dirigirnos unas palabras, pero fue el sábado cuando la abandonó; y después de haber estao “en candelero”, que si en Badajoz, que si en Mérida, aún está porque puertoalbahaqueño alguno haya escuchao algo de la “acctal”, bueno ni tampoco del “ex”, na de na es lo que hemos merecio. Ella que si de Roscón de Reyes, él que si de alterne. Esa “Mansión del Silencio” bien ha hecho honor a su nombre; no habrá otro ayuntamiento igual. Ahora, eso sí, “La Proterva” no paraba (lo sé porque tu chorbo me la ponía); no ha hecho edición especial porque no es de papel, cada día más gente opinando y también los de siempre, su plantilla: “el vástago castrista”, siempre al loro (pues anda joio con la garganta); Aureliano, mu razonable en sus palabras; Juan Ángel, sensacional; “Tronera”, que se sacó de la manga que su carta diaria viniese firmada por más gente, entre ellas Viti, que por el mentor sé que ha mantenio un compromiso constante y ejemplar, lanzándose incluso a entrar en la Asamblea de Extremadura porque quería dar un recao a no sé quién; Leal, siempre atento y pendiente, sí señor; Aparicio, “el fontanero” y Eugenio “el alburquercógrafo”, siempre al lado de quien sufre, que aunque no está “motorizao” enseguida se ofreció para que apareciese su nombre. Los ha habio también de fuera, Cayetano, Montesinos, Píriz (otro que ha dejao la piel por el muchacho, chapó, políticos así vengan pa’cá) y que me perdone algún otro que haya podío olvidar. Mi cabeza no está pa má. El caso que no me preguntes ni cómo ni de donde habrá caío la “manteca” pero el sábado dijo el muchachito, junto a su paje, el del sindicato USO, siempre a su lao, ante una plaza abarrotá, que le había caío la “breva”, pero no te lo pierdas, también a los demás, con toó lo que le debían. Esta “casa de los Truenos” sabe hasta malabares, de no tener una perra, ni pa pañuelo, zaca, una “morterá”. ¿De dónde? ¡Ah, qué sabe nadie, a mí que me registren!

Así que, como por bien empapá te doy, leedora aplicada de la revista, te participo: ¡aquí “arde Troya”!  Yo no indago mucho, ya me conoces, prefiero comprender sin preguntar, pero pienso que nuestros políticos están “cagaos”. “Zurraos”, decimos aquí. De hecho, nuestro movimiento “Resistencia” (como algunos le llaman), más fuerte que nunca, ha comenzao a calar y la gente no aguanta más, exige, son muchas las faenas jugás, y ya no cabe mentir: perras no hay, ideas tampoco, capacidad de gestión menos, entonces qué nos quea, el supino ridículo. Por no haber, ni siquiera explicación. Bueno y pronunció un discurso de Navidad casi allá por Reyes, que vamos, de vergüenza; como si TÚ queriéndome hablar de Portugal lo hicieses de Noruega. Puro cachondeo de no haber sío por lo dramático de la situación. A final cada cual merece lo que es, y de un pueblo ya embrutecío por tantos descaros se puede esperar cualquier cosa. Así que con palabras de Landero (sí, el Luis, de nuevo) en su novela “La vida negociable” (al fin terminé el otro) te resumo: “el pasado da pena y el futuro temor”.

Te dejo, me toca recogé el pan y esperá a rancho. Solo desearte, de corazón, que el discernimiento siga iluminando tus pasos. Si acaso vienes, haz por verme, me alegraría, que no son muchos contentos los que me depara la vida. De quien en alta consideración te tiene, Ramiro.

Monsaraz, no inverno 2021

¡Hola, Sr. Ramiro! Se le ha pegado, sueña usted ya en portugués, Jjjj. Tampoco yo fui a Golegã; cae alejado, cerca de Santarém. Por conocidos sé que allí se celebra la Feira Nacional do Cavalo Lusitano de pura raza. Los jinetes van vestidos de la ropa tradicional de la región de Ribatejo y tiene lugar un desfile muy vistoso, con carruajes de época. É região vinícola; se vende uno de fabricación local, el famoso “pies de agua”, que no es sino vinho hecho añadiendo agua al hollejo (bagaço, decimos aquí) de la uva. Lo añaden a los pollos asados y esta bom.

Viu o que viu, navio atracado no porto. Celebro que Juan Pedro haya depuesto su actitud y haya abandonado su cruel e inhumana huelga de hambre; y si encima ha percibido sus emolumentos, mejor que mejor (sí, hablo en singular porque, la verdad, que el resto de afectados hayan estado ahí a verlas venir y no a su lado desde el minuto uno, como que no). Y ya somos dos los que no sabemos de dónde ha podido caer el maná; pero el caso es que pareciese que se ha abonado. Ahora que ello no limpia la gestión caótica llevada a cabo. Es para pensarlo, en el transcurso de los acontecimientos, seis días de huelga de hambre, con Filomena azotando, um resfriado do diabo, en esa puerta del Consistorio situada en plena umbría (isso é uma geladeira), ese hombre hecho un cuatro, tirado en el suelo, de mala manera… el comportamiento de la “acctal” no ha podido lograr mayor cota de indignidad e indecencia; pasar delante del funcionario y negarle el saludo, ni buenos días, ni cómo te encuentras, ¿dónde se ve eso? Lo cuento aquí, en Portugal, tanto en Monsaraz como en Vila, en Evora o donde vaya, y no dan crédito, me preguntan que cómo es posible, que si no tiene sentimientos. El otro día, en un seminario de estudio, un compañero con el que charlo con frecuencia (Joao, me cae muy bien), me insinuó algo interesantísimo para preguntarle a ella, que si no se da cuenta que su gestión política debiese facilitar la vida de los alburquerqueños y no complicársela, como está ocurriendo. E ele esta certo. Así que nada me extraña a estas alturas; la Villa “calentita” lleva mucho tiempo; le doy la razón, ahora está que “arde”; ¿y no será todo fruto de haber utilizado como método el chantaje: por la tutela que te ofrezco me concedes tu lealtad y sumisión? No seré yo quien pierda el tiempo buscando causas meta históricas para explicar el malestar social que se vive en la Villa, nada más lejos que situar su origen en el carácter de los puertoalbahaqueños, como usted nos llama, aunque me alegro que vayan surgiendo momentos de estos; es hora de que la gente deje de preferir ser hormigas antes que fieras. Lo nuestro, lo del movimiento “resistencia” (parece que hablásemos de otra época histórica, verdad) va calando, as pessoas estão abrindo os olhos, y yo siento fascinación por haber caído en su seno, mostrándome disconforme con este ayuntamiento, para mí sin pies ni cabeza. ¡Cuán halagador resulta despreciar los valores que tan aceptados son en la villa! Me chifla. Y personalmente le estoy muy agradecida a toda la gente que, de un modo u otro, se ha mojado, a todos sin exclusión (usted los ha nombrado), aquellos que, desterrando miedos, han expresado su opinión, nos han tenido informados e incluso entretenidos, del pueblo y de fuera; gracias, de corazón, a todos ellos, pero esto debe servir de acicate para la reflexión (quién nos gobierna, cómo lo hace, a qué aspiramos, qué merecemos, hacia dónde vamos…)

A propósito de ello, el otro día leyendo a Isaías Lafuente, su libro Y el verbo se hizo polvo, donde refleja los siete pecados capitales con el uso del castellano (como verá sigo amando la lengua de Cervantes), se me ocurrió lo mismo pero sobre el comportamiento de nuestros gerifaltes locales, y dice así: sólo la ignorancia deja entrever que aún tengan prosélitos; sólo la envidia deja entrever que emulen a otros; sólo la gula deja entrever que todo lo negativo (mentiras, engaños…) le siente bien; sólo la avaricia deja entrever el afán desbordado de hablar y hablar sin comunicar nada; sólo la lujuria deja entrever que presuman de proyectos sin que conozcamos uno solo de ellos; sólo la soberbia deja entrever que se sientan orgullosos de su quehacer sin haber hecho absolutamente nada; sólo la pereza deja entrever que coman sin dar palo al agua; sólo la ira deja entrever promesas y olvidos al unísono. ¿Qué le ha parecido?

Voy a dejarle. Desejo-Ihe o melhor, seja feliz com o seu; y esté tranquilo, si vuelvo (por ahora no, Portugal está también fatal con la Covid; no sé dónde vamos a llegar), a buen seguro que iré a saludarle a usted y a la familia; pero escríbame cuando quiera, me resulta reconfortante. Muak, de su amiga, Rosita la portuguesa.