Pulsa «Intro» para saltar al contenido

REFLEXIÓN DOMINICAL: Dios los cría y ellos se juntan

A Víctor Píriz Maya, político, por su entrega en esta lucha que debiera llevar a que ante nuestros ojos se mostrasen, por fin, desvelados, los asientos contables de nuestro cabildo.

Agradecido por lo que es de muchos.

ANTONIO L. RUBIO BERNAL

-Hoy, 9 de agosto 2020, conmemoración también de San Osvaldo de Maserfield, Shropshire –England-, quien, inclinado a la paz, murió en combate-.

De siempre, segundo bocado o buche de lo mismo supo igual. Como observará –carísimo lector-, de nuevo en esta página con un único propósito: otear el patio.  Porque “tú y yo, muchacha, estamos hechos de nubes… y amasados con libertad, muchacha”. Compartir opinión, en el mismo medio, sabe a miel.

# Señor Ramiro, lo mal que me sienta escucharle: “hablar de política en este pueblo, aparte de crearte enemistades, te cierra puertas”. Puede que tenga razón, pero me veo obligada, ¿no cree que aquí la democracia está como “secuestrada”? Datos: total abstención en la participación ciudadana; control sobre votantes; patente de corso para representantes; etc.

¬ ¡Ay, rapariga!, esta época pasará a la Historia de Puerto como la del disparate y el esperpento. (Mal) vender patrimonio para liquidar nóminas atrasadas. Culpar a Promedio para después tener que entonar el mea culpa y obrar en consecuencia. ¿Volveremos al “Cerco del Regaño”? Motivos hay para estar muy hartos de tanta mentira e incumplimiento.

# ¿Acaso piensa usted que aquí no los hay que sueñan con vivir, por siempre, de papá Estado, encarnado en su hijastro Ayuntamiento? Liquidación de lo que tuvo su origen en incumplimientos. Pudiera ser que pudiese, socialmente, que les llevase a elevar su cotización. Le ha tocado el turno al degolladero. Cualquier menudencia, aquí, a los políticos, le otorga licencia o pasaporte. Ganar en el futuro siempre fue incierto, menos aquí.

¬ ¡No fastidies! –Por cierto, encantado que me lo diga una mente joven de mujer-; me siento como si hubiese estado haciendo el papel de puto bobo. Caminando descalzo en pro del cambio. ¿Cabría mayor placer? Cielos que caben en un abrazo, y fronteras al borde de ser traspasadas. En medio, aún, el clientelismo, que ha sido, y sigue siendo, moneda de cambio. Conclusión, más de lo mismo, de lo que repugna: gente con su palabra cautiva por el miedo existente. Triste, ¿verdad? Sigue reinando la inopia. Ser político en plaza deviene ser un auténtico chollo. O por qué crees tú que alguno está tan deseoso de volver. Mejor ser “Gerifalte en plaza” que no “Shadow man”.

# Aquí, cómo le diría yo, pareciese que la era estuviese pariendo un corazón, por la tardanza. Usted y yo bien sabemos que las minas del rey Salomón no están en el cielo, pero nos ha tocado: quien ostenta cargo pretende estar por encima de la institución que representa haciendo de su capa un sayo. La Proterva nos salva. ¡Cuántas gracias! Las crónicas de los plenos, de vergüenza. Y tan pancha. Oposición ninguneada y asuntos tratados según antojo, qué o quién lo impide. ¿La terminación de todo esto? ¡Vaya usted a saber! No me gustaría imaginármela entre tantos socialistas que han celebrado la marcha del Rey emérito, salvo que a los demás se nos otorgue también el derecho a no tener que distinguir el plano institucional que representa una persona del meramente personal.

¬ ¡Ay, menina!, ¿y por qué no te decidiste antes a revelar tus pareceres?  Buen dilema planteas: Monarquía o República. La Monarquía borbónica la conozco desde hace muchos años. La República, salvo nuestra genuine independent banana republic, no, pero miedo me da sólo pensar que cualquier antisistema podemita pudiese ser su Presidente. Que por qué. Estudioso como soy de la Segunda República y humilde conocedor de la España de 1935, pánico sufro reconociendo que el actual escenario político, y económico –salvando encuadre temporal-, cada día se parece más a aquella, no faltando quienes semejanza ofrezcan tanto a Largo Caballero como a Gil Robles. Desconsoladamente, no encuentro a ningún Azaña.

# ¡Me encanta escucharle! Siempre aprendo. Cada día visiono en la carretera, ya de regreso, que Puerto pudiese ser singular ofreciendo su apocalipsis, su peo con voladura, su derrumbe total. ¿Recursos? Difícil que valiese ya aquello de “esto lo pongo aquí y aquello allí”, no por falta de afán sino porque no hubiese ni esto ni aquello para cuadrar las cuentas de la vieja. Mi afición al álgebra me lleva a otorgar razón a M. Friedman: la Gran Depresión no se produjo por otra cosa sino por una mala gestión pública; justito igual que la ruina de Puerto, “paraíso del desgobierno”.

¬ ¡Oh, linda mulherzinha!, -perdona el chocheo propio de la edad-, nunca hubiese imaginado tu gran coraje. Este mundo está al revés; pareciese uno de los espejos cóncavos de Valle Inclán. Quien nada es, gran potestad ostenta. ¿Estás de acuerdo en que aquí se prefiere a la persona antes que a las ideas y proyectos; antes la ineficacia y ruina que no al enderece económico? ¿Quién marcará el rumbo en medio de este lodazal? Razón otorgo a Maquiavelo cuando dijo que “los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven”. Sospecho que entre nosotros hay más de un papa Alejandro VI de quien se dice que “jamás pensó ni hizo otra cosa que engañar a los demás”. Porque semos asina.

# Siendo agnóstica, agradezco, señor Ramiro, que la fuerza sindical, al fin, realizase su quehacer, con Raúl al frente; IPAL, al menos, exigiendo; el PP tratando de espolvorear alfombras en pro del esclarecimiento. Pero lo que más agradezco es comprobar, una vez más, que no teme a expresarse libremente en sus esporádicas entregas.

¬ De bien nacido es ser agradecido. Careces de edad para apadrinarme, pero, sinceramente, no resulta fácil; las cosas nunca son lo que parecen, y las apariencias engañan. Nuestro devenir histórico, cada día lo vislumbro más oscuro. Pavor por nuestro infortunado pasado, un presente calamitoso y nuestra falta de anhelo, propia de la idiosincrasia de los puertoalbahaqueños. La desazón me mantiene cabizbajo, sólo avistando cómo caza la perrina. Pero, ¿quedarme anquilosado y ser carne de cañón de quienes manipulan esta sociedad? /A orientarme con el viento de cachorro lo aprendí; ahora que soy perro viejo, me es más fácil distinguir a los lobos desde lejos/

Ah, no lo olvides. Comprobarás que el bicho no deja de pringar. Una vida normal con precauciones y sin olvidar el peligro; nadie sabe si lo peor ha pasado. ¿Aquellas celebraciones compartiendo “todo” con tus amistades? Toca olvidarlas, por favor. Piensa en regalar, algún día, una rosa tras decir: ¡ay, amor, qué bien, por fin, todo acabó! Feliz domingo.