La situación económica de muchos contratados municipales es ya insostenible porque un buen número de ellos llevan más de dos meses sin cobrar sus salarios y tienen que recurrir a familiares y dejar dinero a deber en establecimientos del pueblo, sobre todo tiendas de alimentación, algunos de cuyos propietarios están ya también preocupados porque el montante de lo que les adeudan es ya importante para los negocios pequeños.
Antes del carnaval, les pagaron un mes a algunos de los trabajadores, pero aún les adeudan otra mensualidad. Uno de ellos nos comentaba que le dijeron en el ayuntamiento que no reconocieran que habían cobrado una de las nóminas, porque podían rebelarse el resto.
En pocos días van a entrar en las arcas municipales fondos del programa Dinamiza de la Diputación, por lo que deberían saldar las deudas con los contratados, pero el problema es que el consistorio adeuda también bastante dinero a empresas y proveedores, algunos de los cuales no sirven ya mercancía al ayuntamiento.
No olvidemos que, entre otras deudas, se deben casi 100.000 euros a Contempopránea, porque el ayuntamiento se gastó el dinero que llegó el año pasado para el festival en otros menesteres.